Es verdad que esperar el autobús no es lo mejor del mundo y los lugares destinados a ello son cualquier cosa menos algo acogedor. La verdad es que, aunque una parada de autobús clásica cumple su función, estéticamente no es grata.
Pero qué tal si nos moviéramos a un pequeño pueblo inglés llamado Walkhampton en Dartmoor, Inglaterra.
Aquí las paradas de autobús no son lo que solían ser, gracias a un desconocido que se ha tomado la molestia de transformar la parada de autobús en un lugar acogedor, cómodo y alegre.
Es casi como si estuvieras en tu casa, solo fue necesario poner algunos cuadros, flores, sillones y algunos muebles más, cojines y floreros.
El contraste es demasiado, puesto que anteriormente el lugar lucia grafitti por todas partes, estaba sucio y seguro no olía bien.
Bueno, es que al día de hoy te puedes sentar a esperar tu autobús en una mecedora mientras lees el periódico.
Este pueblo tiene solamente 850 personas, y si ante nadie lo conocía, ahora todos hablan de él por sus vistosas y particulares paradas de autobús.
La cosa es que nadie sabe quién fue el que realizo tan radical cambio. Imagínate esperar el autobús en la sala de estar de tu casa, esto es muy parecido.
Y esto no es todo, ya que la misteriosa persona que a cambio el lugar, lo va re decorando cada cierto tiempo, poniendo incluso adornos de acuerdo a las fechas de celebración.
Se puede ver decoración alusiva a San Valentín, por ejemplo. Incluso hay dulces para los que esperan el autobús.
Y como es obvio las personas originarias de este pueblo están realmente felices con todo esto. De lo que están todos de acuerdo es que este aparente pequeño cambio a hecho que haya alegría, la cual esperan continúe.
La parada de camión a menudo amanece con cartas agradeciendo tal suceso, lo hacen porque realmente se sienten agradecidos y porque quieren animar a la misteriosa persona.
Sería genial que mas personas tuvieran esa actitud de servir y aportar algo ala comunidad.