“Mis padres murieron solos, el coronavirus se los llevó el mismo día”

Severa Belotti y Luigi Carrara no serán recordados en la historia de esta nueva enfermedad ya que se unen a lo más de 800 víctimas del virus en Italia, pero para su hijo será un momento que no podrá olvidar debido al drama que vivió.

Esta pareja vivía en el pueblo de Albino, en la provincia de Bérgamo por el norte de Italia y nunca pasó por sus mentes que el día que entraron al hospital perderían la vida el mismo día con solo 2 horas de diferencia.

Permanecieron 8 día encerrados en su casa, registrando temperaturas de hasta 39ºC sin recibir nada de asistenta médica. Después fueron internados al hospital Papa Juan XXIII.

Luigi fue ingresado el día sábado y su esposa Severa el día domingo al mismo hospital. El martes ambos dieron sus últimos suspiros. Luigi murió a las 9 mientras que su esposa a las 11.

Su hijo Lucas relató lo que él vivió: “Murier0n s0los, así es como funciona este virus. Tus seres queridos se quedan solos y ni siquiera puedes decirles adiós, abrazarlos, tratar de darles algo de consuelo, tal vez incluso una buena mentira: todo va a ir bien”

Cuenta que sus padres estaban atrapados durante la cuarentena por mucho tiempo debido a que no había médicos disponibles. Incluso intentó contactar con personal médico a través del número de emergencias pero nadie acudió a tiempo.

“No había un médico cerca”. Luca intentó llamar al 112. “Que quede claro que no culpo al 112, los entiendo y de hecho solo tengo palabras de agradecimiento porque intentaron salvarlos”, aseveró.

La situación en el hospital cambia totalmente: “En el hospital Papa Juan XXIII en Bérgamo todo es desastroso. El personal no sabe dónde colocar a los pacientes, probablemente los médicos están haciendo una selección y dejando morir a los mayores. Pero es que ¿qué pueden hacer?”

El padre de Luca no tenía registros de enfermedades previas “Estaban bien los dos, mi padre, a su edad, no sabía lo que era ir al médico”

Hizo un llamado a la reflexión ya que las noticias señalan que el COVID-19 afecta severamente a las personas de la tercera edad. «Cuando les pasa a tus padres de verdad es muy difícil. Ya no los he vuelto a ver, se han llevado los cuerpos al cementerio y sabemos que tardarán unos días en incinerarlos porque hay demasiados muertos», concluyó.

Luca y su familia se encuentran actualmente en cuarentena. Su tristeza es inmensa ya que por una parte no puede salir de su casa a velarlos, y su entierro también va a tardar ya que hay demasiados muertos esperando para ser sepultados. Lamentamos mucho la perdida de Luca y queremos crear más consiencia sobre lo que puede hacer el nuevo coronavirus.

Hay que mantener a todos informados y que tomen las precauciones correspondientes.