El personal médico es la primer línea de defensa que tenemos

Cada día crecen más los casos de contagios entre el personal médico mundial. Con ya más de 1 millón y medio de casos confirmados de coronavirus la cifra no para de crecer, y lamentablemente los decesos tampoco.

Araceli Buendia se suma a estos tristes casos. La mujer latina de 63 años vivía en Pembroke Pines, Florida y dedicó más de 30 años a su vida como enfermera.

Parte de su tiempo lo dedicó a preparar a las nuevas generaciones de enfermeras en el hospital Jackson Memorial.

Su vocación se vio demostrada cuando la pandemia de COVID-19 llegó a su país, entregándose a su labor hasta su último aliento.

El sábado pasado el hospital Jackson anunció el deceso de la enfermera más admirable que han tenido en su institución debido a las complicaciones de la enfermedad.

“Nuestra familia lamenta la pérdida de la enfermera Araceli Buendia Llagan, quien falleció recientemente por complicaciones de COVID-19”, dijo un vocero de la institución en un comunicado público.

Araceli se convirtió en la segunda trabajadora del ramo médico en dar su vida a causa del coronavirus y también en la segunda en dar positivo en el hospital donde laboraba.

La otra enfermera, de nombre Herine Baron, dio positivo en su prueba de coronavirus al igual que su hijo de 7 meses de edad. Herine está en aislamiento y da información sobre su evolución en su canal de YouTube.

Para el hospital Jackson su personal sanitario son los verdadero héroes que arriesgan su vida por otros.

“Mientras batallamos en esta crisis de salud mundial, enfermeros, rescatistas y personal médico en todo el mundo están sirviendo en la primera línea de batalla. Estos profesionales de la salud, como Araceli, son los verdaderos héroes, y los aclamamos a todos”, afirmó el comunicado del Jackson.

Comparte esta nota como muestra de respeto por todos los médicos que están arriesgando su vida por defender la de otros de garras del coronavirus.