Es muy posible que la anécdota que hay detrás de esta imagen, propicie la reflexión profunda acerca de las consecuencias de nuestros actos sobre la naturaleza en particular y el planeta en general.
En Internet ha comenzado a circular de manera muy dinámica, una foto conmovedora que muestra a un guardaparques dando consuelo a un gorila, al parecer muy afligido, porque perdió a su madre víctima de unos cazadores furtivos. Hombre y gorila en actitud solidaria y bastante inusual.
En la foto de la parte superior, Patrick Karabaranga, un guardaparques en el Parque Nacional Virunga que se encuentra en el este de la República Democrática del Congo, está sentado junto a un gorila huérfano, y posando su brazo sobre el hombro del gran primate entristecido, en el santuario de gorilas del parque. El nexo y comunicación que parece prevalecer entre ellos es en verdad muy emocionante, y el gorila muestra su aprecio por la simpatía colocando su mano en la pierna del guardabosques.
Pareciera que, tal y como aseguran muchos, los momentos de tristeza logran un acercamiento entre todo tipo de seres vivos y diluyen las diferencias. Es obvio que entre hombre y gorila se han acortado las distancias y surge un lazo de comprensión.
De manera similar a otros gorilas que habitan en el santuario del parque, este ejemplar perdió a su progenitora por culpa de unos cazadores furtivos, del mismo modo que otros tres huérfanos que viven hoy en día dentro de los cotos del santuario, o como consecuencia de inescrupulosos traficantes que buscan sacarlos de forma ilegal del parque.
Con un censo superior a más de 200 gorilas de montaña, el Parque Nacional de Virunga detenta ─en forma aproximada─ una cuarta parte de la población total de gorilas de montaña que existen en el mundo.
Es indispensable para todos los habitantes del planeta, el hacer conciencia sobre la protección de animales en peligro de extinción, así como y valorar la labor que realizan organizaciones, gobiernos y personas para protegerlos. Con la fotografía anterior se ponen en evidencia que los animales no son objetos inanimados sino que tienen sentimientos. Puede advertirse en el vídeo a continuación, la dedicación con que son protegidos los gorilas en esta reserva.